Muchos pueden decir “es sólo un partido”. Y sí, es sólo un partido. Pero…¿nos pueden culpar a los que nos conformamos con poco? Sí, es sólo un partido el que hizo que tenga una sonrisa de oreja a oreja durante todo el día y que la siga teniendo. Es sólo un partido el que hizo posible que a las diez y media de la mañana haya varios asientos libres en el tren Sarmiento hasta la estación Padua. Es sólo un partido el capaz de opacar las malas vibras de ese maldito profesor que te puso una entrega de trabajos justo el día de hoy. Es sólo un partido el que por un momento te hace olvidar tu carácter de desocupado u ocupado en malos términos. Sólo un partido. Y yo te estoy hablando desde una postura de alguien casi neutral. De alguien que le gusta el fútbol, pero que no vive enfermo por él, tal vez por no haber tenido un gran acceso a los partidos cuando era chiquito (nunca tuve cable) y que, salvo por “Fútbol de Primera”, tenía que recurrir a programas futbolísticos pelotudos como alguno de Fantino. Y si yo estoy así, no me quiero imaginar como estarán esos verdaderos locos del fútbol. Esos que se jactan de amar al deporte más que a sus viejas. Aunque pensándolo bien, no creo que estén tan contentos. No. Cómo van a estar tan emocionados esos engreídos que se calientan y que, contrariamente, no disfrutan de toda la “fanfarria del mundial”, de todo lo que implica este campeonato. Porque sí, lo sienten, pero creo que el mundial lo disfruta más alguien “común” que alguien “enfermo del fútbol”. Alguien que no se concentra en criticar a los jugadores y decir “ahí le tendría que haber pegado como en el sexto partido que jugó en la Eurocopa en el minuto 53’”, sino alguien que disfruta de la fiesta, de las estúpidas notas de color que hacen los periodistas enviados a Sudáfrica que no tienen otra cosa que hacer más que pelotudear. Alguien que está mirando un partido y dice “mirá como la mueve ese chiquito de Ghana” y no ese otro, enfermo del fútbol, que lo mira mal y le contesta “¿Qué hablas? Qué la va a mover, si ese Anthony Annan se manda cada cagada en el Rosenborg. Ni sé cómo llegó al mundial”. No, lamentablemente ese que contesta así no lo disfruta tanto. Si hasta uno se queda pensando “bueno loco, paraaa. Si ahora está jugando bien, dejalo vivir”. Sí, definitivamente pienso que un no tan enfermo del fútbol (llamémosle “futbolero”) disfruta más de la época mundialista que ese adicto al balompié (llamémosle “futboloso”). Claro, porque el futboloso es como ese bailarín profesional de cumbia y cuarteto que va a bailar a un boliche y le molesta ver cómo los demás hacen cualquier cosa con sus pies y la pasan bien, e incluso la rompen. ¡Flaco, ¿Qué te jode?! Viniste a un boliche no a una competencia nacional de baile o a un ensayo de “Bailando por un sueño”. Fijate dónde estás parado antes de criticar. Y el futboloso es así. Hasta se pone celoso de que a vos se te genere la misma alegría que a él. Él piensa que tiene más derecho. El futboloso es aquel que, por ejemplo, estuvo puteando todo el entretiempo de Argentina – Corea del Sur a Demichelis, a la vieja y a Evangelina Anderson por ese error de último minuto que causo el gol de Corea. Es aquel que cuando terminó el partido, en vez de estar feliz por el triunfo de Argentina, salió a la calle a gritar “Muerte a Demichelis”. En cambio el futbolero se puso mal, se le apagó un poco la sonrisa cuando el defensor argentino se durmió y lo hicieron cartera en esa última jugada. Pero siguió feliz, sabiendo que fue un error y que seguro no se va a volver a cometer. El futbolero está feliz. Está contento esperando que llegue el martes para alentar a su selección nuevamente. Yo me siento un futbolero y sé que por eso muchos futbolosos me tratan de ignorante. Pero no me importa. Yo estoy feliz…y doblemente orgulloso. Porque ganó Argentina y porque gracias a su gran actuación, hoy el goleador del mundial es “El Pipita”.
gmg

De todos, este es el peor.
ResponderEliminarPorque definitivamente, no sabes nada de futbol
gracias
aveces . solo aveces es mejor guardare la opinión... y Callar a la hora de gritar un tiro libre... ..
ResponderEliminarme encanto, yo posta q no se nada de futbol y tambien me re emociono solo con los mundiales viendo esos partidos que no me importa si jugaron bien o mal pero ganaron, ya con eso soy feliz.. muy bueno pipa
ResponderEliminartotalmente de acuerdo pipa. xavi
ResponderEliminarcomo futboloso, me siento orgulloso de decir: CHUPAME UN HUEVO PIPA =) jajajajajajaj
ResponderEliminarmuy buenoo gmg. abrazo
Muy bueno! Es cierto, eso es lo peor.
ResponderEliminarEstos futbolosos ¬¬
Un beso. Xime